Orinar dentro de casaPerros - Ideas originales, notas y artículos
Orinar dentro de casa
Educación y adiestramiento, Perros
La costumbre de algunos perros de orinar dentro de casa, puede obedecer a la necesidad de marcaje territorial (en el caso de machos dominantes), al hecho de tener cerca una hembra en celo o a otros motivos. Estos perros, en sus paseos diarios, que normalmente suelen ser de 2 ó 3 veces, juegan y hacen sus necesidades y el orinarse dentro de casa, suele ser una conducta aislada o puntual.
Si la micción se produce por alguna cuestión de las mencionadas, con un simple estímulo aversivo y con la limpieza rápida del sitio marcado, se podría solucionar.
La finalidad es que el perro no asuma la casa como una parcela más donde puede orinar.
Pero lo que realmente suele ser ya un hábito y a su vez un problema para el dueño, es el perro que se saca a pasear más de 3 ó 4 veces al día, más de media hora e incluso los fines de semana se le saque a la calle más veces y los paseos se alarguen a una hora, el perro se dedique a jugar con otros perros, a saludar al vecino o a traerle un palito al dueño, pero de orinar en la calle nada de nada.
El dueño opta por pasear al perro con su correa, sin soltarlo, por si el perro asocia los paseos con juegos y el baño con la casa, bueno...¡pues ni por ésas! . El perro en la calle no hace nada y al llegar a casa espera a que el dueño se marche a otra habitación o se va él para defecar a su antojo. Nunca lo hace delante de su dueño ¿ y eso por qué? ¿qué pasa? - ¿por qué el perro actúa así?
La respuesta es simple:
- en algún momento al perro se le ha castigado la conducta de defecar, no ha canalizado bien el porque del castigo y el perro se esconde a la hora de defecar ya que ahora entiende que delante del dueño no puede hacer nada por temor al castigo. Los animales y el perro entre ellos, aprenden por asociaciones, el perro ha canalizado mal la información que le ha dado su dueño al regañarle por hacer sus necesidades y ahora piensa que cuando defeque se le castigará, para evitar el castigo, se esconde de su dueño e incluso otros optan por comerse sus heces.