La colombofilia

Cuidado de las Aves, Aves

La colombofilia es el arte de criar y entrenar palomas mensajeras. Desde tiempos remotos, las palomas fueron utilizadas con excelentes resultados en las guerras de egipcios, griegos, romanos y árabes. En nuestro país las primeras nociones de colombofilia, más tarde declarado deporte nacional por Ley 12913, fueron introducidas por ciudadanos belgas, originarios de uno de los países con mayor actividad colobófila en el mundo.

Actualmente más de 130 instituciones distribuídas en todo el país, nuclean alrededor de 6.500 palomares que albergan una cantidad de 100 a 150 aves cada uno. Los puntos de mayor movimiento colombófilo se concentran en las provincias de Buenos Aires, Santa Fé y Córdoba, quedando un importante número de aficionados radicados en el resto del país.

Las principales razas de origen europeo tales como Sión, Hules, Begue, Ansene, Groters, Bricout, etc., han sido cruzadas entre nuestros aficionados para lograr mejoramientos estructurales, obteniéndose considerables resultados que han quedado demostrados en carreras.

La paloma mensajera está considerada como un auténtico atleta del aire, en estado natural no se aleja del palomar, en él vive, se alimenta y se reproduce, pero entrenadas y estimuladas con el estilo de su cuidador llegan a cubrir distancias hasta algo más de 1.000 km. con velocidades variables que pueden llegar a verdaderos records de hasta 120 km. horarios con condiciones climatológicas favorables, siendo un promedio normal el de 60 km. horarios.

Poseen un esqueleto preparado para resistir el esfuerzo desarrollado por sus músculos - pesan entre 350 y 400 g.- plumaje abundante y muy suave con características especiales para lograr la mínima oposición de rozamiento al viento, y un destacado e innato sentido de orientación que las hace volver al lugar de procedencia atraídas por su pareja, sus crías o simplemente su nido desde lugares completamente desconocidos.

Las competencias
Luego de haber sido encestadas, las palomas son trasladadas al punto de suelta conforme el Plan de vuelos que cada año se programa con debida antelación y el que debe respetarse en su totalidad según su programación original, el convoyer que las conduce, efectúa la suelta de acuerdo a las instrucciones recibidas de la Comisión de Suelta.

Suelta de Palomas en Competencia
Efectuada ésta y luego de dar algunas vueltas sobrevolando el punto de partida para orientarse, las mensajeras emprenden camino a su hogar, acción que no es fácil, a veces las inclemencias del tiempo, las aves de rapiña o los furtivos cazadores, suelen demorar o tronchar el ansioso regreso.

Los colombófilos aguardan según los cálculos preestablecidos, minuto tras minuto el arribo de sus pupilas, las que luego de ingresar a sus palomares se les retira el anillo de goma, que introducido en una pequeña cápsula metálica se deposita en un reloj constatador y accionando un dispositivo especial registrará en una cinta de papel, día, hora, minutos y segundos, quedando de tal manera grabada la hora de arribo. Cada movimiento está previamente estudiado para realizarlo en el tiempo mínimo, ya que una fracción de segundo demorada, puede significar la pérdida de un campeonato. Luego de finalizado el concurso, los asociados se dirigen a la Sociedad en la que son abiertos los relojes y registradas las marcadas, luego de las cuales se efectúan los cómputos que darán el resultado obtenido en la competencia.

Como dato ilustrativo digamos que diariamente se consume en el país entre 30 y 35 tt. de alimento utilizándose como base fundamentalmente maíz, trigo, lentejas, arvejas y vicia, que sumados a los gastos de medicamentos para conservar en buen estado de salud a las pupilas y gastos de traslado para los concursos, representan sumas considerables que deben absorber los colombófilos, que nunca compiten por dinero.

Quien practica la colombofilia, desarrolla permanentemente sentimientos biológicos naturales y se sensibiliza, llegando a esteblecer un entendimiento con las palomas envuelto en un clima de cálido cariño, expectativa y emoción, acentuándose en mayor grado en el momento de llegar sus pupilas a la meta.